SaberEs: Una recontrucción intercultural

SaberEs es una iniciativa del colectivo radial y cultural Localizate que busca empoderar a las comunidades de sus practicas y conocimientos presentes en los territorios. nuestra punto de partida comienza con la formación que el equipo de formadores describe como: 

Este grupo se destacó por su diversidad, no solo en términos de sus lugares de origen, sino también en cuanto a sus preferencias individuales y formas de relacionarse. Cada participante aportó una perspectiva única, enriqueciendo así
el entorno educativo con una mezcla de experiencias, gustos y estilos diversos.

Las estrategias de aprendizaje que implementamos fueron experimentales, creativas y específicas para nuestro entorno. Reconozco que nuestro espacio, el territorio en el que concluimos nuestras actividades, adquirió significados particulares
que contribuyeron a mi fortalecimiento personal. Mantener una comunicación constante con los estudiantes resultó fundamental, a pesar de que formábamos parte de un grupo impulsado por las emociones.

Participar en este contexto no solo actuó como motivación, sino que también se convirtió en un medio para cerrar la brecha entre nosotros. 

La clave radicó en la interacción constante, permitiendo la fluidez en la comunicación. Este enfoque facilitó la recepción de sugerencias e ideas, no solo por parte de los estudiantes, sino también de los docentes. La gestión del grupo y la resolución de problemas mejoraron significativamente gracias a este intercambio constante de perspectivas e información

Toda esta movida también ocurrió porque, al principio, las expectativas de los jóvenes respecto a lo que íbamos a aprender y las herramientas que íbamos a recibir eran ambiguas. Incluso en el momento en que se decide invitar a los
interesados, algunos entraron solo para esquivar alguna recuperación, y lo interesante fue que varios de ellos, que no tenían claro de que se trataba el espacio, decidieron quedarse en todo el proceso y participaron activamente y absorbieron todos los conocimientos en lo que respecta a la fotografía y después la emisora.

Iniciamos hablando del porqué y el qué fotografiar, como herramientas de cómo fotografiar con un sentido o intención clara, en este momento jugamos mucho, y experimentamos diferentes formas de usar la cámara. Luego nos adentramos en las narraciones, hicimos ejercicios creativos como el cadáver exquisito y creamos historias ficticias a partir de elementos iniciales como personajes y situaciones. También nos lanzamos a ejercicios de lectura en voz alta que
introdujo todo el tema de la emisora y la reportaría.

Se evidencia el desarrollo del grupo en este contexto, así como en su capacidad para articularse en pos de resultados significativos. Aunque no todos los trabajos realizados estuvieron completamente elaborados, su impacto fue innegablemente significativo. Durante el trayecto, se experimentaron diversos momentos de tensión que, al final, resultaron fundamentales para aterrizar y comprender el propósito de este espacio.

Este proceso no consistió simplemente en acudir a una clase disciplinaria; más bien, implicó la apropiación activa del espacio. La gestión de la energía también se reveló como un aspecto interesante, en la cartografía tras una sesión de reportería, el abordaje a las personas era algo invasivo; sin embargo, con el tiempo, se estableció un acercamiento respetuoso que propició una respuesta más positiva.

El proceso implicó también la exposición a espacios públicos, donde el riesgo es inherente, en contraste con el ambiente seguro de la institución educativa.
Este enfoque se basó en acuerdos previos, destacando especialmente que el acordó inicial con los formadores fue no asumir roles disciplinarios, frente a este acuerdo considero que fue un aprendizaje mutuo, por un lado, la necesidad de establecer acuerdos claros y balanceados en contextos pedagógicos con niños y jóvenes, reconociendo la importancia de la mediación por parte de losestudiantes en la construcción de un ambiente participativo y constructivo.